La dinámica del puente de las emociones que están realizando los concursantes de Supervivientes ha hecho que más personas que están fuera del reality también se abran en canal a contar experiencias de su pasado. Chelo García-Cortés confesó en Sálvame que su madre tuvo una enfermedad psicológica, que hizo que estuviera continuamente ingresada en clínicas desde que ella tenía tan solo cinco años.